martes, 2 de abril de 2013

Consejero y Aventurero

IGLESIA CARISMATICA JESUS MISERICORDIOSO
EL CONSEJERO Y EL AVENTURERO
PABLO Y TIMOTEO
Mons. Rodriguez Vera Daniel 
Texto Bíblico: Hechos 16:1-3.

1. INTRODUCCIÓN

El Club de Aventureros es conocido por ser un grupo de niños y niñas alegres que confían en Jesús y aprenden que deben ser el reflejo de la luz del cielo para todas las personas con quienes entran en contacto. El Club de Aventureros y el desarrollo del aventurero dependen de otras personas. Es fundamental la participación de un Consejero del Club, la persona que va a hacer toda la diferencia en las actividades de los aventureros y de las aventureras de la unidad. Los padres y la familia del niño son también personas fundamentales que necesitan estar compenetradas con las actividades del club.

El mensaje en este día de los aventureros es sobre una familia semejante a la suya. Las semejanzas pueden estar en la constitución, en la conducción de la enseñanza, y también en el resultado. ¿Vamos a conocer a las personas involucradas en ella?

2. LAS PERSONAS INVOLUCRADAS EN EL CLUB DE AVENTUREROS.

a. El Consejero.
ablo trabajaba como discípulo de Cristo llevando el mensaje a las ciudades que necesitaban conocer las buenas nuevas del Reino de Dios. Como nuestros consejeros del Club de Aventureros, él se preocupaba por el bienestar de los hermanos que hacía poco tiempo conocían el mensaje. Cada tanto los visitaba y los animaba a permanecer en la fe . Hay personas que no reconocen el trabajo importante que, así como Pablo, algunos realizan. Hechos capítulo 14 registra que en una visita a Iconio y Listra, respectivamente ciudad y colonia romanas, Pablo fue amenazado, apedreado y acusado de promover enseñanzas falsas. 
Aún en momentos de dificultad, el siervo del Señor continuaba siendo ejemplo de referencia para las personas que están en el comienzo de su actividad misionera. Cuando le ocurrieron a Pablo esas cosas en la ciudad de Listra, había entre los testigos oculares alguien que estaba siendo preparado por el Espíritu Santo para ser obrero de Cristo. Era un joven llamado Timoteo, éste vio a Pablo levantarse y alabar a Dios. 

b. El Aventurero. 
Timoteo se impresionó al ver a Pablo dispuesto a dar la vida en favor del ministerio de salvación. Él apreciaba la santidad de la obra de un pastor, y estaba dispuesto a recibir la enseñanza de Pablo, éste reconoció esas cualidades cuando volvió a visitarlos en la ciudad de Listra.

c. La familia del Aventurero. 
Timoteo creció en un hogar donde le enseñaron a amar a Dios. Su familia tenía una constitución peculiar. Su padre era griego y su madre Eunice, y su abuela Loida, judías. “Y que desde la niñez has sabido las Sagradas Escrituras, las cuales te pueden hacer sabio para la salvación por la fe que es en Cristo Jesús”. 2 Timoteo 3:15. “La palabra de Dios era la regla por la cual esas dos piadosas mujeres habían guiado a Timoteo. El poder espiritual de las lecciones que había recibido de ellas conservó puro su lenguaje y evitó que le contaminaran las malas influencias que le rodeaban. Así las que le instruyeron en el hogar habían cooperado con Dios en prepararlo para llevar responsabilidades”. 

d. La Decisión.
Timoteo fue circuncidado siguiendo el consejo de Pablo, asumió públicamente que el evangelio de Cristo era todo en su vida. A pesar de ser todavía muy joven llevó sus responsabilidades con humildad cristiana.

3. EL DESARROLLO DE SU TRABAJO.

“El gran apóstol sondeaba a menudo al discípulo más joven, preguntándole en cuanto a la historia bíblica; y el viajar de lugar en lugar, le enseñaba cuidadosamente cómo trabajar con éxito… En su trabajo, Timoteo buscaba constantemente el consejo y la instrucción de Pablo”. 

Juntos viajaron por muchas ciudades y Timoteo llegó a ejercer una influencia importante sobre aquellos que aprendieron a amar a Jesucristo. 

Cuando se encontraban distantes uno del otro, Pablo, al igual que nuestros consejeros de aventureros, procuraba mantenerse presente en el recuerdo del joven Timoteo. Podemos leer las dos cartas enviadas por Pablo que están en la Biblia y son los libros 1ª y 2ª Timoteo.

Timoteo inició sus actividades pastorales siendo todavía muy joven, y Pablo lo animaba con consejos y motivaciones en las cartas a las iglesias, recomendando a los hermanos a cuidar bien de él.

4. LAS ENSEÑANZAS Y LOS RESULTADOS.

La comunidad reconocía a Timoteo como un joven que amaba verdaderamente a Dios. En Hechos 16:2 leemos: “y daban buen testimonio de él los hermanos que estaban en Listra y en Iconio”. 

El consejero ayuda a la familia a promover el crecimiento del aventurero. Filipenses 2:22: “Pero ya conocéis los méritos de él, que como hijo a padre ha servido conmigo en el evangelio”.

El consejero se preocupa con el bienestar del aventurero. 1 Corintios 16:10: “Si llega Timoteo, procurad que esté con vosotros con tranquilidad, porque él hace la obra del Señor lo mismo que yo”.

El aventurero aprende a través del ejemplo. Romanos 16:21: “Os saludan Timoteo, mi colaborador, y mis parientes…”

El consejero se integra a la familia del aventurero. 1 Corintios 4:17: “Por esto mismo os he enviado a Timoteo, que es mi hijo amado y fiel en el Señor…”

La familia tiene la función principal en la educación del aventurero. 2 Timoteo 1:5: “Trayendo a la memoria la fe no fingida que hay en ti, la cual habitó primero en tu abuela Loida y en tu madre Eunice, y estoy seguro que en ti también”.

El aventurero crece participando en las actividades de la iglesia, consciente de las necesidades de ésta y de la urgencia de predicar a otros acerca del regreso de Jesús. 1 Tesalonicenses 3:2: “…y enviamos a Timoteo, nuestro hermano, servidor de Dios y colaborador nuestro en el evangelio de Cristo, para confirmaros y exhortaros respecto a vuestra fe…”

5. CONCLUSIÓN

Jesús está pronto a conceder bendiciones y dones a aquellos que entregan todo lo que tienen a favor de su obra de salvación. Que en nuestra mente permanezca el consejo que Pablo escribió a Timoteo, consejo que el amigo Jesús quiere dar a todos sus aventureros: “Ninguno tenga en poco tu juventud, sino sé ejemplo de los creyentes en palabra, conducta, amor, espíritu, fe y pureza”.

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