SACERDOTE Y FELIGRESIA
Salmo 70
LIBERACION
Oh Dios, acude a librarme; Apresúrate, oh Dios, a
socorrerme.
Sean avergonzados y confundidos Los que buscan mi
vida; Sean vueltos atrás y avergonzados.
Los que mi mal
desean en y mi familia.
Sean vueltos atrás, en pago de su afrenta hecha, Los que dicen: ¡Ah! ¡Ah!
Gócense y alégrense en ti todos los que te buscan, Y
digan siempre los que aman tu salvación: Engrandecido sea Dios.
Yo estoy afligido y menesteroso; Apresúrate a mí, oh Dios. Ayuda mía y mi libertador eres tú; Oh
Dios, no te detengas. Socórreme y líbrame en tu justicia; Inclina tu oído y
sálvame. Tú eres mi roca de
refugio, adonde recurra yo continuamente. Tú has dado mandamiento para
salvarme, Porque tú eres mi roca y mi
fortaleza.
San Miguel Arcángel aplasta toda maldición de los enemigos a traviesa la espada de la justicia.
San Rafael sana mis enfermedades de mi cuerpo y alma.
Ven Espíritu Santo desciende sobre mí, Ven Espíritu Santo.
PROVIDENCIA
Señor danos la Providencia
Divina a cada uno de las personas que
estamos en tu casa y la que pedimos familiares y amigos.
Por el trabajo, por los
estudios, por los proyectos empresariales, por la obtención de mi propia casa.
Aconteció como ocho días
después de estas palabras, que tomó a Pedro, a Juan y a Jacobo, y subió al
monte a orar. Y entre tanto que oraba, la apariencia de su rostro se hizo otra,
y su vestido blanco y resplandeciente.
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